La comunicación: un valor poco apreciado (pero esencial)
- Beatriz Rodríguez
- hace 5 días
- 3 Min. de lectura

Hoy comienza una nueva semana, y con ella da inicio una etapa muy especial para mí: retadora, emocionante y largamente deseada.
He decidido dar un paso adelante para cumplir uno de mis sueños, uno de mis objetivos más ambiciosos: ser psicóloga.
Siempre lo digo: en otra vida debí de ser médico. Desde pequeña quería ser cardióloga. Quería salvar vidas, literalmente. Y aunque el camino no me llevó a la medicina, sí me ha llevado al cuidado de las personas desde otro enfoque: la mente, las emociones, el alma.
Me he formado durante años, y aún hoy sigo aprendiendo. Me apasiona estar informada, descubrir nuevas corrientes, avances, estudios… Sé que no llegaré a tratar patologías del corazón desde la medicina, pero como psicóloga sé que también puedo ayudar a muchas personas a sanar su corazón desde otro lugar.

Y en todo este proceso de formación y vocación, he comprendido algo muy profundo:👉 La comunicación es una de las herramientas más poderosas que tenemos, y a la vez una de las más infravaloradas.
📚 ¿Qué es la comunicación?
Como buena capricornio que soy, me gusta empezar por el principio de los principios. Y qué mejor que consultar una fuente fiable. Según la RAE, la comunicación es:
1. Acción y efecto de comunicar o comunicarse.2. Trato, correspondencia entre dos o más personas.3. Transmisión de señales mediante un código común al emisor y al receptor.4. Unión que se establece entre ciertas cosas mediante canales, pasos, escaleras, etc.
Me gustaría centrarme en la primera: acción y efecto de comunicar. Ese esquema tan básico que aprendimos en el colegio —emisor, receptor, mensaje, canal, código— sigue estando vigente, aunque hoy parezca que lo olvidamos.
Y qué fácil parece… pero qué difícil es a veces comunicarse de verdad.
🕰️ De los tambores a los emojis: un viaje acelerado

Muy atrás quedaron las señales de humo, las pinturas en cuevas, los mensajeros a caballo, las cartas manuscritas o los telegramas. Incluso los “sms” o los mensajes en el contestador del teléfono fijo nos parecen parte de otra era.
Hoy, todo es táctil, digital, inmediato. Comunicamos a distancia, sin contacto, sin contexto, sin matices. Vivimos en una era de lo anónimo, globalizado, acelerado e impersonal.
💡 Recuperar la esencia de comunicar
La comunicación real no vive en la inmediatez, sino en la conexión.Nada, absolutamente nada, puede sustituir la sensación de una conversación cara a cara:las miradas, los silencios, el tono, el tacto, los gestos, la complicidad.
Hoy nos hablan del “be to be”, del “face to face”, del “one to one”, como si fueran conceptos modernos.Pero son simplemente la esencia de lo humano.
👁️🗨️ Comunicarnos con todos los sentidos (¡incluso los ocultos!)
(Imagen: Gráfico creativo de los sentidos con íconos)
Para mí, comunicarse de verdad es hacerlo desde todos los sentidos, y no solo los cinco tradicionales. Te comparto mi visión personal:
👂 Oído
👁️ Vista
👃 Olfato
👄 Gusto
✋ Tacto
✨ Intuición (el sexto sentido)
🌌 Percepción extrasensorial (empatía, conexión espiritual)
🧠 El nuevo sentido: la capacidad de comunicar para ser comprendidos, crear vínculos y formar identidad dentro de la sociedad.
Este “octavo sentido” nace de la necesidad de sentirnos entendidos. Es el puente entre lo que somos y lo que el mundo percibe de nosotros.
🤝 Conclusión: hablemos desde el alma

La comunicación no es solo una herramienta. Es una forma de vida. Una forma de acercarnos, de comprendernos, de sanar.
No dejemos que se pierda en lo automático, lo tecnológico, lo superficial. Comuniquemos con presencia, con emoción, con alma.
👉 ¿Y tú? ¿Cuál fue la última vez que tuviste una conversación que realmente te tocó el corazón?
Te leo en los comentarios.
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